
El Municipio de San Isidro suspendió por 180 días el sistema de fotomultas, tras encontrar inconsistencias en la ejecución de los convenios firmados en 2020 y 2022 con la Universidad Nacional de General San Martín (UNSAM) y la Universidad Nacional Raúl Scalabrini Ortiz (UNSO) que tercerizarían funciones y responsabilidades en empresas privadas
El municipio intimó a las universidades a que en un plazo de 15 días respondan los requerimientos de información para aclarar las ambigüedades y contradicciones presentadas hasta el momento en respuesta a los reiterados requerimientos que hizo el Municipio.
Entre ellas, por ejemplo, la falta de precisión sobre el rol de terceros que supuestamente tienen a su cargo parte del proceso y un desconocimiento del marco jurídico aplicable al sistema.
El plazo de suspensión de las fotomultas rige desde el 23 de abril inclusive.
Durante el período en que se encuentra suspendido el sistema, el Municipio llevará a cabo diversos operativos a cargo del cuerpo de Agentes de Tránsito municipal, tanto fijos como móviles, asegurando se respeten las velocidades permitidas, los semáforos y los cruces peatonales, controlando el tránsito y cuidando la seguridad vial.
La decisión la tomó el intendente Ramón Lanús por decreto, y de manera transitoria, hasta que el Municipio pueda garantizar que la ejecución del sistema de fotomultas se ajuste a la normativa vigente y se oriente a la reducción de la siniestralidad vial y no a fines recaudatorios.
“Las fotomultas deberían ser una herramienta para cuidar la seguridad vial, no pueden nunca perseguir un fin recaudatorio. Queremos garantizar que el sistema de fotomultas esté de verdad orientado a reducir accidentes y salvar vidas, no a sacarle plata al vecino, y mucho menos para beneficiar a empresas y/o funcionarios políticos escondidas detrás de convenios oscuros”, dijo Lanús.