
El papa Francisco lo designó como futuro sucesor de Oscar Ojea en la diócesis que abarca los partidos de San Isidro, Vicente López, san Fernando y Tigre.
El papa Francisco designó obispo coadjutor de San Isidro a monseñor Guillermo Caride, quien se convertirá en el sucesor de monseñor Oscar Ojea cuando deje la diócesis que conduce desde diciembre de 2011.
Caride, de 61 años y formado en el seminario de San Isidro durante la gestión episcopal de Jorge Casaretto, viene acompañando a Ojea como obispo auxiliar desde 2018 y su nombramiento como obispo coadjutor implica el derecho a suceder al actual titular. Eso ocurrirá cuando lo disponga el propio Francisco.
Ojea tiene 77 años y es presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, mandato que finalizará a fines de este año. Se estima que el cambio en la conducción de la diócesis de San Isidro, se dará después de esa fecha.
“Aquí nací, me crié, descubrí a Jesús en la fe, ingresé al seminario, y fui ordenado sacerdote y obispo. Son muchos los rostros y nombres de tantas personas y comunidades que, a lo largo del ministerio, se han ido grabando en el corazón”, expresó monseñor Caride en su mensaje.